El Centro Democrático redefine su estrategia para 2026 tras la absolución de Álvaro Uribe
La reciente absolución del expresidente Álvaro Uribe Vélez por parte del Tribunal Superior de Bogotá ha reconfigurado el panorama político del Centro Democrático de cara a las elecciones de 2026. El fallo no solo marca un cierre judicial para el líder del uribismo, sino que también refuerza su papel como figura central dentro del partido.
Tras conocerse la decisión, surgieron nuevas discusiones internas sobre si Uribe finalmente ocupará el puesto 25 en la lista al Senado, una estrategia diseñada para impulsar la votación del partido y aumentar su presencia en el Congreso. Al mismo tiempo, la senadora María Fernanda Cabal propuso —sin mayor respaldo hasta ahora— que el expresidente sea candidato a la Vicepresidencia, aunque esa posibilidad choca con restricciones constitucionales.
En los próximos días, Uribe se reunirá en Rionegro (Antioquia) con el director del partido, Gabriel Vallejo, y los cinco precandidatos presidenciales —Cabal, Paloma Valencia, Paola Holguín, Miguel Uribe y Andrés Guerra— para definir la estrategia electoral y los mecanismos que permitirán escoger al candidato único.
El partido también evalúa si la encuesta interna que definirá al aspirante presidencial será realizada por una firma nacional o internacional. Mientras tanto, dentro del Centro Democrático se percibe un ambiente de reorganización y optimismo, impulsado por el fallo absolutorio, que fortalece la narrativa de Uribe como figura clave en la carrera hacia 2026.


